Me parece que ahora
toca mi turno...así que ahí os va. Voy a contar lo que casi hacemos, lo que me
hubiera gustado hacer y lo que realmente hice, así que es una entrada
larguilla.
Yo he hecho
prácticas en el IES Las Llamas, en la asignatura de Ciencias de la Naturaleza en 2º de la ESO. La verdad es que mi
tutora es una mujer muy implicada y muy activa, y el primer día que llegué me
contó un montón de actividades que quería llevar a cabo con los chavales que me
gustaron mucho: salida al Centro del Litoral de la Maruca con los alumnos de
1º ESO, ver una reproducción sobre los cinco reinos de los seres vivos en un
iglú hinchable que instalaba la
Caixa en el instituto, concurso de cristalografía... Todo
sonaba estupendamente, pero el problema vino cuando intentamos compatibilizar
los tiempos de la asignatura con todas estas actividades.
Al final conseguimos
llevar a cabo todas las actividades propuestas, menos la que para mí era la más
interesante: aprender qué son los cristales fabricándolos con sus propias manos,
para luego participar (o no) en el concurso de "cristalización en la
escuela" con el fin de celebrar el Año Internacional de la Cristalografía.
El programa
funcionaba de la siguiente forma:
-
los profesores realizaban un curso online de formación de cristalización y
cristalografía
-
desde la Universidad
de Oviedo (se definieron 7 zonas terrirtoriales encargadas del programa, Oviedo
era la más cercana) nos mandaban los materiales necesarios para la fabricación
de cristales y los pasos a seguir
-
los alumnos tenían que experimentar en el laboratorio con estos materiales,
siguiendo las instrucciones y siendo guiados por los profesores (mi tutora y yo
en este caso). Para ello se agrupaban en grupos de 3, fabricaban su cristal,
tenían que llevar al día su cuaderno de laboratorio y luego realizaban un
póster explicativo en el que contaran cómo lo habían hecho, el resultado y su
experiencia.
-
De todos los grupos se elegía el mejor póster, que pasaba a la final
regional. De ahí los mejores proyectos pasaban a la fase final, y los ganadores
recibían premios, que dependían de los recursos disponibles.
Objetivos
El Concurso de
Cristalización en la Escuela
está diseñado con objeto de transmitir a alumnos de educación secundaria cómo
se hace y disfruta la Ciencia
y cómo se compite en los ámbitos científicos a través de un formato de
“concurso competitivo” que utiliza todos los ingredientes del método
científico: desde la investigación en el laboratorio hasta la presentación de
resultados científicos en un “congreso científico”. Por tanto, el
principal objetivo no es otro que la divulgación de la importancia del mundo de
los cristales en la sociedad moderna y sobre todo fomentar el estudio, el
trabajo sistemático, el pensamiento racional y la comunicación entre los jóvenes
estudiantes, aprovechando experimentos atractivos de cristalización.
El concurso de
cristalización supone una nueva vía de acercamiento a la comunidad educativa
que tiene, entre una de sus principales virtudes, la capacidad de implicar
tanto a los profesores, como a los estudiantes, y a la sociedad en general, a
través de los padres, y cuyos objetivos son:
- La enseñanza de los conceptos fundamentales de Cristalografía y Cristalización aprovechando el atractivo natural que el propio crecimiento de los cristales ofrece a los alumnos.
- Fomentar las vocaciones científicas entre los estudiantes pre-universitarios.
- Dar a conocer cómo se trabaja y compite en ámbitos científicos.
- Divulgar la importancia de la Cristalografía en la sociedad.
Criterios de Evaluación
Los criterios de
evaluación que se tienen en cuenta en este programa me parecen especialmente
importantes, porque son los que se tienen en cuenta en la vida real en una
carrera científica. Aunque aún son muy pequeños, es importante que vayan
conociendo cómo funciona el mundo y a qué van a atenerse si deciden seguir una
formación científica. A nivel personal me habría venido estupendamente que me
enseñaran en la escuela lo que luego me han pedido en el laboratorio, que poco
tenía que ver con un examen de conocimientos.
Los criterios son
los siguientes:
a)
Creatividad: Grado de innovación en la realización de
experimentos. Modificaciones innovadoras al procedimiento
b) Plan
de Trabajo: (a) Aplicación del método científico en la elaboración del
plan de trabajo; (b) Estructuración coherente y clara del plan de trabajo; (c)
Descripción correcta de los cristales obtenidos; (d) Uso adecuado de las
figuras, tablas, gráficas y/o fotografías.
c)
Cuaderno de Laboratorio: Claridad del cuaderno de laboratorio
y de los experimentos llevados a cabo.
d) Exposición
Oral del Poster: Conocimiento y dominio del procedimiento o
metodología utilizada para la elaboración del cristal; El uso del poster como
ayuda en la explicación y no como punto de lectura para la misma; Utilización
del lenguaje científico-técnico apropiado en la exposición oral que ha de
hacerse con coherencia y claridad; Seguridad en la expresión de los conceptos
adquiridos y resultados obtenidos; Actitud y comportamiento adecuados para un
contexto de debate científico.
Recursos e innovaciones didácticas
Los innovadores kits
de cristalización utilizados en el Concurso, no sólo permiten la realización de
experimentos siguiendo un protocolo establecido, sino que además incentiva a
investigar el papel de otras variables físicas (temperatura, solubilidad,
concentración, etc.) dando la oportunidad al estudiante de aportar innovaciones
y mejoras en el proceso de cristalización. Esto es especialmente valioso
porque permite alimentar la curiosidad científica de los estudiantes que
consiguen familiarizarse con el método científico a través de una actividad
amena y divertida. En definitiva, es una vía muy útil para fomentar las
vocaciones científicas.
Además, en el curso
de formación del profesorado se proporciona a los profesores herramientas
didácticas muy útiles (vídeos demostrativos e impactantes, documentales
científicos sobre la cristalización, ejemplos prácticos de aplicaciones de la
cristalización y la cristalografía en la vida diaria, etc.), que facilitan la
actividad docente y proyectan una visión dinámica y atractiva de la ciencia, la
tecnología y la innovación. Esta actividad no sólo sirve para la formación
continua de los profesores de secundaria, sino que la gran mayoría incorporan
las prácticas de cristalización como parte del currículo en sus clases de
ciencias.
Conclusión
A mí me parece que,
de haber podido llevarlo a cabo, los alumnos/as habrían aprendido muchísimo no
sólo de cristalografía, si no de la ciencia de verdad: saber llevar a cabo un
proyecto, seguir un método científico, innovar, colaborar con otras personas,
expresarse en público…etc. Me parece un proyecto que lo engloba todo; además
como ya he dicho también es muy interesante para el profesorado, porque lleva a
cabo una formación continua, y pone los pies en el mundo científico que a nivel
de aula está prácticamente olvidado.
Tanto me habría
gustado hacerlo que he quedado con mi tutora en que durante el mes de junio,
cuando estén más liberados, vamos a hacer una cristalización durante unas
cuantas tardes a la semana. Además los propios alumnos/as están muy
interesados, porque desde que les dijimos que cabía la posibilidad de
participar en el concurso nos han preguntado cada día que si lo íbamos a hacer
o no. Fue un palo tener que decirles que finalmente no, pero al proponerles
esta segunda opción de ir por las tardes durante una semana, algunos accedieron
encantados de la vida y he de decir que es muy gratificante.
LA INNOVACIÓN QUE DURANTE MI
UNIDAD DIDÁCTICA ME HABRÍA GUSTADO LLEVAR A CABO
El concurso que he
explicado anteriormente podríamos haberlo llevado a cabo en cualquier momento
de la asignatura, pero durante mi unidad didáctica a mí me habría gustado
llevar a cabo un proyecto de innovación y romper con la metodología que llevaba
mi tutora, que era buena pero tradicional. Sin embargo, no me atreví a cambiar
tanto las cosas durante dos semanas, principalmente porque como han dicho ya en
alguna entrada de este blog, para poder innovar a gran escala es importante
conocer a tus alumnos, tener experiencia y sentirte segura.
Así pues, os voy a
contar el planteamiento que me hubiera gustado darle a mi unidad didáctica (la
función de nutrición en los seres vivos) , y que le daré a dicha unidad
didáctica si algún día consigo trabajar como profe:
- Distribuiré a los alumnos por grupos de 4, formados de manera heterogénea, y les propondré que elijan un animal bien acuático, bien terrestre, bien aéreo; o una planta. A partir de ahí, cada grupo irá estudiando los procesos de nutrición del animal o de la planta correspondiente, siempre guiados por mí. Las primeras sesiones serán dedicadas a la búsqueda de información (aula de informática si fuera posible, documentales, libros, etc) y las últimas sesiones se dedicarán a exposiciones orales en las que cada grupo contará los procesos de nutrición de cada animal/planta . El último día organizaré un juego, una especie de “trivial” en la que los equipos serán los grupos organizados previamente, con preguntas acerca de la nutrición de los animales y plantas vistos.
- La evaluación será constante y lo más personalizada posible, y de esta manera se fomentará la autonomía, la búsqueda de información y el trabajo cooperativo. La realización de una prueba escrita no se contempla como necesaria, aunque la metodología se iría adaptando al funcionamiento de la clase y al proceso de enseñanza- aprendizaje que se observe en los alumnos.
LA INNVOVACIÓN QUE SÍ QUE
LLEVÉ A CABO
Por último voy a contar lo que
realmente hice con mis alumnos.
A parte de utilizar presentaciones
de power point, vídeos, actividades interactivas etc, quise llevar a cabo con
ellos un experimento. Me habría gustado analizar la cantidad de oxígeno que
producía una planta mediante la fotosíntesis (también se estudiaba en esta
unidad), que es un experimento relativamente sencillo, pero de nuevo debido a
la escasez de recursos y de tiempo no pude llevarlo a cabo, así que me decanté
por un experimento más corto y sencillo que explicaré a continuación.
Dentro de la unidad didáctica
“la función de nutrición”, se estudiaba el aparato respiratorio y los pulmones;
así que cuando fuimos al IES Ría del Carmen y calculamos nuestra capacidad
pulmonar, consideré que era un experimento sencillo y vistoso que podría
servirles a los alumnos para entender el intercambio gaseoso que se producía en
los pulmones, calcular y manejar volúmenes, y además trabajar con ellos la
educación en salud, ya que las personas deportistas tienen una capacidad
pulmonar bastante mayor que las no deportistas, y además los fumadores tienen
dicha capacidad muy disminuida debido a los efectos perjudiciales del tabaco.
Así pues, me dispuse a realizar
el experimento con mis chicos. Por si no os acordáis de cómo funciona, os cuento
brevemente en qué consiste y dejo aquí la imagen que lo resume:
- la persona sopla por el tubo
y desplaza un volumen de agua equivalente al volumen de aire que contenga en
sus pulmones

Haciendo caso de los consejos de nuestro querido profesor Jose Palacios, compré una garrafa de 5 litros para que pudieran expulsar todo el aire sin necesidad de cambiar el tubo (una capacidad vital media ronda los 4 litros). Bien, pues primer ERROR que cometí: me fié de dicho consejo y no comprobé el experimento antes de llevarlo a cabo con mis alumnos. Cuál fue mi sorpresa cuando empezaron a soplar y la botella se deformaba, de manera que calcular el volumen era prácticamente imposible. Tuvimos que apañarnos como pudimos y hacer una medida comparativa entre unos y otros, pero no pude repetir el experimento en condiciones porque no encontré ningún recipiente rígido de 5 litros.
La verdad es que creo que con
el experimento aprendí yo más que ellos. A los alumnos les gustó cambiar el
chip de clase al laboratorio, entendieron bien el porqué del desplazamiento del
agua y se quedaron con la copla de la importancia del deporte y los perjuicios
del tabaco; pero yo aprendí algo mucho más útil: nunca jamás lleves a cabo un
experimento con tus alumnos que no hayas probado tú en esas mismas condiciones
previamente.
Y esto es todo. Espero que os
sirva de inspiración ;)
Las botellas de cinco L que utilizaba eran de un plástico bastante más rígido que las de ahora.
ResponderEliminarHabría que ir a garrafas de gasolina, latas de aceite ...