El director del informe Pisa reclama a España más autonomía para los profesores
El director del informe Pisa, Andreas Schleicher, considera que el profesorado español necesita más autonomía en la docencia
y trabajar más en colaboración con los compañeros como uno de los
factores que ayuden a que el rendimiento académico del sistema educativo
español deje de estar estancado
"Los profesores no son dueños de su profesión", al contrario de lo que pasa en países de la OCDE que sí han sido capaces de mejorar en la Evaluación Internacional de Estudiantes de la OCDE (Pisa), según indica en una entrevista concedida a Efe.
Schleicher, que interviene hoy en la inauguración de la Semana de la Educación de Santillana, explica que el modelo educativo español es "muy prescriptivo", pues el Ministerio de Educación es quien principalmente establece los contenidos, pero al profesorado "no se le permite progresar dentro de su profesión, ni contribuir al desarrollo del currículum o ayudar a sus compañeros".
Preguntado por la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), señala que brinda "muchas oportunidades", aunque todo dependerá de cómo se aplique y aquí son clave los profesores y los directores de centro.
"Si al implementarla se crea un sistema de dos vías -advierte-, si se te dan bien los estudios sigues la formación académica, si se te dan mal sigues la profesional, entonces van a conseguir lo opuesto a lo que esperaban".
O en una entrevista en la cadena SER:
"Los profesores no son dueños de su profesión", al contrario de lo que pasa en países de la OCDE que sí han sido capaces de mejorar en la Evaluación Internacional de Estudiantes de la OCDE (Pisa), según indica en una entrevista concedida a Efe.
Schleicher, que interviene hoy en la inauguración de la Semana de la Educación de Santillana, explica que el modelo educativo español es "muy prescriptivo", pues el Ministerio de Educación es quien principalmente establece los contenidos, pero al profesorado "no se le permite progresar dentro de su profesión, ni contribuir al desarrollo del currículum o ayudar a sus compañeros".
Preguntado por la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), señala que brinda "muchas oportunidades", aunque todo dependerá de cómo se aplique y aquí son clave los profesores y los directores de centro.
"Si al implementarla se crea un sistema de dos vías -advierte-, si se te dan bien los estudios sigues la formación académica, si se te dan mal sigues la profesional, entonces van a conseguir lo opuesto a lo que esperaban".
O en una entrevista en la cadena SER:
El director del Informe PISA, Andreas Schleicher, es uno de los protagonistas de la XXVIII Semana de la Educación que, organizada por la Fundación Santillana,
analizará hasta el miércoles las prioridades y el futuro de la
educación española en el contexto internacional. Un informe, el PISA, en
cuyas conclusiones se ha basado reiteradamente el ministerio de
Educación para justificar su nueva ley.
En una entrevista concedida a la Cadena SER, Schleicher resta importancia a la falta de consenso político que ha logrado en España la conocida como ley Wert. "Creo que no es tanto una cuestión de consenso político sino que la clave es lograr una reforma que los profesores, los padres, los colegios, los estudiantes, sientan como propia. Tener el apoyo de la profesión educativa es mucho más importante que simplemente buscar un consenso político", explica Schleicher quien también se declara partidario de "despolitizar" el debate educativo. "De alguna forma, cuanto más podamos despolitizar las reformas educativas y lograr que sea algo que tenga que ver con los estándares profesionales y las expectativas de los estudiantes, más posibilidades habrá de tener una reforma con un impacto a largo plazo".
Preguntado por la falta de consenso en la comunidad educativa -las familias de la escuela pública, los estudiantes y los cinco sindicatos que representan al profesorado se han opuesto a la ley, huelga incluida- Scheleicher sostiene que "la profesion educativa es una profesion en la que a nadie le gustan los cambios en las reformas, es una reacción muy natural entre los profesores", aunque también cree que su participación en la implementación de la reforma "será clave", ya que son un elemento esencial que deberían contar con más autonomía para ofrecer respuestas diferenciadas a alumnos con distintas capacidades .
El director de PISA considera que las diferencias educativas en España no son esencialmente diferencias entre comunidades autónomas, ni tampoco entre centros, sino que se registran dentro de cada colegio. En ese sentido, Schleicher admite que España debe analizar con detalle por qué se está registrando un retroceso en la equidad en el sistema educativo, en el sentido de que se amplía la brecha en el rendimiento escolar entre alumnos de distintos contextos socioeconómicos.
Schleicher ha defendido las reválidas como un instrumento valioso de diagnóstico de problemas pero también de incentivo del esfuerzo y el rendimiento. Preguntado por si no pueden acabar resultando una barrera de segregación, al impedir titular o proseguir los estudios al alumno que las suspenda, el director de PISA responde que "en los países asiáticos tienen unos exámenes muy duros pero también tienen muchos más alumnos con buenos resultados educativos que en España. Hoy en día, España no tiene exámenes en los que los estudiantes se jueguen mucho, la ausencia de barreras no es una garantía de que todos los estudiantes van a mejorar su rendimiento".
Sobre la supresión de Educación para la Ciudadanía, como materia obligatoria de Derechos Humanos y Valores Cívicos para todo el alumnado, Schleicher asegura que una formación en valores es importante en la escuela y sería "un error reducir la educación a las necesidades más inmediatas del mercado de trabajo, pero al mismo tiempo vemos que es necesario en España alinear mejor las necesidades de las empresas con lo que ofrecen las escuelas, vemos que hay mucha gente formada pero que no encuentra trabajo y empresarios que aseguran no encontrar los perfiles que necesitan. Hay que trabajar para resolver ese desfase", aunque, en su opinión, eso no debería llevar a una reducción de las materias de valores o humanísticas en el currículum.
En una entrevista concedida a la Cadena SER, Schleicher resta importancia a la falta de consenso político que ha logrado en España la conocida como ley Wert. "Creo que no es tanto una cuestión de consenso político sino que la clave es lograr una reforma que los profesores, los padres, los colegios, los estudiantes, sientan como propia. Tener el apoyo de la profesión educativa es mucho más importante que simplemente buscar un consenso político", explica Schleicher quien también se declara partidario de "despolitizar" el debate educativo. "De alguna forma, cuanto más podamos despolitizar las reformas educativas y lograr que sea algo que tenga que ver con los estándares profesionales y las expectativas de los estudiantes, más posibilidades habrá de tener una reforma con un impacto a largo plazo".
Preguntado por la falta de consenso en la comunidad educativa -las familias de la escuela pública, los estudiantes y los cinco sindicatos que representan al profesorado se han opuesto a la ley, huelga incluida- Scheleicher sostiene que "la profesion educativa es una profesion en la que a nadie le gustan los cambios en las reformas, es una reacción muy natural entre los profesores", aunque también cree que su participación en la implementación de la reforma "será clave", ya que son un elemento esencial que deberían contar con más autonomía para ofrecer respuestas diferenciadas a alumnos con distintas capacidades .
El director de PISA considera que las diferencias educativas en España no son esencialmente diferencias entre comunidades autónomas, ni tampoco entre centros, sino que se registran dentro de cada colegio. En ese sentido, Schleicher admite que España debe analizar con detalle por qué se está registrando un retroceso en la equidad en el sistema educativo, en el sentido de que se amplía la brecha en el rendimiento escolar entre alumnos de distintos contextos socioeconómicos.
Schleicher ha defendido las reválidas como un instrumento valioso de diagnóstico de problemas pero también de incentivo del esfuerzo y el rendimiento. Preguntado por si no pueden acabar resultando una barrera de segregación, al impedir titular o proseguir los estudios al alumno que las suspenda, el director de PISA responde que "en los países asiáticos tienen unos exámenes muy duros pero también tienen muchos más alumnos con buenos resultados educativos que en España. Hoy en día, España no tiene exámenes en los que los estudiantes se jueguen mucho, la ausencia de barreras no es una garantía de que todos los estudiantes van a mejorar su rendimiento".
Sobre la supresión de Educación para la Ciudadanía, como materia obligatoria de Derechos Humanos y Valores Cívicos para todo el alumnado, Schleicher asegura que una formación en valores es importante en la escuela y sería "un error reducir la educación a las necesidades más inmediatas del mercado de trabajo, pero al mismo tiempo vemos que es necesario en España alinear mejor las necesidades de las empresas con lo que ofrecen las escuelas, vemos que hay mucha gente formada pero que no encuentra trabajo y empresarios que aseguran no encontrar los perfiles que necesitan. Hay que trabajar para resolver ese desfase", aunque, en su opinión, eso no debería llevar a una reducción de las materias de valores o humanísticas en el currículum.
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